Este texto no sé dónde lo encontré, pero lo tengo desde hace tiempo. Realmente me llegó...
Mi vida es de unos 10 a 15 años.
Cualquier separación de ti será dolorosa.
Dame el tiempo para entender lo que quieres de mí.
Confía en mí. Es crucial para mi bienestar.
No te enfades conmigo por mucho tiempo, y no me encierres como castigo. Tú tienes tu trabajo, amigos y entretenimientos. Yo sólo te tengo a ti.
Háblame. Aunque no entiendo tus palabras, entiendo tu voz cuando me habla.
Sabe bien que como sea que me trates, yo nunca lo olvidaré.
Antes de que me golpees, ten en cuenta que yo tengo dientes que fácilmente podrían aplastar los huesos de tus manos, pero elijo no morderte.
Antes de que me regañes por ser flojo o poco cooperativo, pregúntate si no puede haber algo que me esté molestando.
Tal vez no me esté alimentando correctamente, estuve mucho tiempo al sol, o mi corazón se está poniendo viejo y débil.
Encárgate de mí cuando envejezca. Tú también envejecerás algún día.
Y no me abandones en mi último viaje. Nunca digas "no podría verlo", o "ojalá que ocurra en mi ausencia". Todo es más fácil para mí si tú estás ahí.
Te ama; Tu perro
lunes, 22 de febrero de 2010
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